UN RATITO PARA COMER

Después de toda la mañana y parte de la tarde, hicimos un alto para reponer fuerzas, ya eran más de las 4 de la tarde y le dijimos a Rizwan, (nuestro guía) que nos llevara a un sitio para comer, el restaurante se llama el “pavo real” y de allí son las fotos del primer álbum. Comida típica hindú, con lo cual os podéis imaginar lo que picaba y eso que nos lo rebajaban un poco, y también os imagináis las cervezas que cayeron por culpa del picante y claro, por el calor.

Después de comer y con la boca en llamas, nos fuimos a ver un taller de confección y  otro de joyería. Seguimos en Jaipur ¡eh!, lo digo para que la gente se sitúe en el mapa. En uno veréis a unas mujeres preparando madejas de lana ya teñida para luego hacer las alfombras, nosotros también pudimos  ver el proceso de teñido y estampado de las telas, y os pongo unas cuantas fotos. Así como el tejido de las alfombras, y en otras dos fotos podéis ver a un señor recortando y limpiando una alfombra ya terminada, todo ello bajo la atenta mirada de Rafa y Ester.

En este taller vimos el pulido de las piedras preciosas y semipreciosas, con las que luego montan los anillos, los colgantes, pendientes, brazaletes etc. etc. En la foto que aparecen Rafa y Ester con una cosa en la mano que parece un puro, pues en la punta de ese chisme hay un rubí pegado y en proceso de pulido. En la foto numero 10, podéis ver los rubíes sobre una tela.

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